martes, 30 de septiembre de 2014

Incrédulo

Quino celebró los 50 años de Mafalda junto a la estatua de la niña y dijo que no puede creer que haya pasado tanto tiempo. "Yo no me lo creo".




Con  motivo de los primeros 50 años de Mafalda, a la estatua de la niña que se encuentra en la vecina orilla se le agregaron Susanita y Manolito, como para que se sienta menos sola.
El mismísimo Quino llegó hasta ahí y se sentó rodeado de sus creaciones. "Yo no me lo creo. No puedo creer que hayan pasado cincuenta años. Es como les pasa a los arqueros, que de pronto les hacen un gol y no saben por dónde les pasó la pelota", dijo según recoge Clarín. "Gracias por venir a la fiestita, gracias a todos por el cariño".

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